domingo, 27 de marzo de 2011

Malos tiempos

Esta semana he pasado por un mal momento: la tristeza y las ganas de dejarlo todo invadieron mi vida. Necesitaba descansar después de dos semanas llenas de cosas que hacer. Necesitaba el fin de semana pero veo que cada uno de ellos es incluso más corto que el anterior y que mis ganas de olvidarme de todo, de salir con mis amigos y de estar a mi rollo crecen por momentos. No sé cómo lo voy a hacer para que cada semana no acabe cabreada con mis amigos o conmigo misma.

Es una situación que me supera pero tengo que aprender a lidiar con ella como sea.

El caso es que para pasar por este trance prefiero hacerlo sola, sin recurrir a nadie ya que no me gusta ir llorando a mis amigos contándoles mis problemas. Da una imagen de victimismo que no soporto y, aunque algunas personas digan que sí, a mí no me gusta ser el centro de atención.

Por eso manifiesto mis enormes ganas de tener unas vacaciones. La parte mala es que quedan menos de tres semanas para ello y tengo entre medias cosas importantes que hacer donde tengo que enfocar toda mi atención y mis ganas. ¿Otro problema? Las pocas ganas que tengo. Ha habido pocas veces en mi vida en las que no he tenido ningunas ganas de llegar al colegio y sentarme en mi sitio para aprender; esta vez era más bien para ver la vida pasar. Hay que cambiar la situación y enfocarlo de una forma diferente.

No quiero seguir así pero , aviso, esto no cambiará mucho hasta que quede con los colegas o las vacaciones estén aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario